Extractos de: "Huari: Sueños, montañas y versos" Libro inédito.
"Pocas veces existió tanta adhesión y cohesión entre el hombre y su habitad. El celador y su templo se fundieron con tanto vigor y prolijidad. El primero relativamente efímero, el segundo eterno; el primero ya leyenda, el segundo historia. Así podemos presentarlos a Don Marino Gonzáles y al santuario de Chavín, si todavía con osadía y temor podemos separarlos corriendo el grave riesgo de equivocarnos y tropezar en las graníticas páginas de estas dos vidas paralelas
Don Marino fue discípulo, amigo y aplicado depositario de la sabiduria del gran paladín del autoctonismo Don julio César Tello que, descubrió para la humanidad la magnificencia de nuestro santuario, como la obra de una raza (la indígena) que vaga proscrita entre las soberbias moles de los andes y que es digna de parangonarse con las más avanzadas culturas y civilizaciones del mundo.
"Cuando lo conocí – contaba el maestro entusiasmado a sus Alumnos – era muy pequeño, en instancias de esas visitas de estudio a "Chavín" que nuestros maestros de la Ex – prevocacional programaban para reforzar las asignaturas de Ciencia Sociales y de las que quedan en el rescoldo de mi recuerdo el viejo, pesado y lerdo camión de don Julio Valle que, partía de la ciudad de Huari a las 3 de la mañana y llegaba a Chavín a las 10, convertido en un hospital lleno de caritas pálidas y famélicas; los exquisitos fiambres que degustábamos y principalmente queda, el hombre, la leyenda, la erudición, el libro abierto de nuestra historia transmitidos desde el íntimo crisol telúrico de ese señor llamado Marino González Trejo. Había que escucharlo para realmente comprender y concluir que detrás de este hombre de rostro adusto y melancólico, existía un rtemanso donde reposaban las respuestas de tantos dilemas y el por qué de cada punto cardinal, de cada piedra, de cada vértice, de cada todo , por más pequeña que esta sea. Él no era un guía, era un Amauta ..."
Pocos como él – añadió con convicción - sintieron con tanto amor a Chavín, Pocas personas inculcaron tanta sabiduría e influyeron marcadamente en la mente y el espíritu de las generaciones que visitaron el santuario y escucharon su prédica y en ella su adhesión a tan glorioso pasado y portentoso legado, colocando así en un punto descollante a Chavín y a su estela inacabable en nuestra historia..."
"Cuando lo conocí – contaba el maestro entusiasmado a sus Alumnos – era muy pequeño, en instancias de esas visitas de estudio a "Chavín" que nuestros maestros de la Ex – prevocacional programaban para reforzar las asignaturas de Ciencia Sociales y de las que quedan en el rescoldo de mi recuerdo el viejo, pesado y lerdo camión de don Julio Valle que, partía de la ciudad de Huari a las 3 de la mañana y llegaba a Chavín a las 10, convertido en un hospital lleno de caritas pálidas y famélicas; los exquisitos fiambres que degustábamos y principalmente queda, el hombre, la leyenda, la erudición, el libro abierto de nuestra historia transmitidos desde el íntimo crisol telúrico de ese señor llamado Marino González Trejo. Había que escucharlo para realmente comprender y concluir que detrás de este hombre de rostro adusto y melancólico, existía un rtemanso donde reposaban las respuestas de tantos dilemas y el por qué de cada punto cardinal, de cada piedra, de cada vértice, de cada todo , por más pequeña que esta sea. Él no era un guía, era un Amauta ..."
Pocos como él – añadió con convicción - sintieron con tanto amor a Chavín, Pocas personas inculcaron tanta sabiduría e influyeron marcadamente en la mente y el espíritu de las generaciones que visitaron el santuario y escucharon su prédica y en ella su adhesión a tan glorioso pasado y portentoso legado, colocando así en un punto descollante a Chavín y a su estela inacabable en nuestra historia..."
"Absortos y entusiasmados escucharon los alumnos la larga perorata de su Maestro. Ante el interés creciente, sin dilación se programó una visita a Chavín para el día viernes de la semana próxima. La programación anual del área de Personal Social así lo exige. Ël también aprovechará -de la visita- para entregarle a don Marino Gonzáles un ejemplar de la Revista "Caretas" que data del año de 1986, en cuya tapa aparece la foto y en el interior una crónica sobre el célebre celador..."
Hay razones subyugantes que hacen de Chavín un destino codiciado y permanente para el turista nacional y extranjero. Llegar a él desde Huari, Huaraz o Lima, es fácil y cómodo por las condiciones que la pista, el transporte , alojamiento, etc hoy ofrecen.
POSDATA: El Congreso de la República ha homenajeado a la cantante boricua Olga Tañón. Qué lastima y pena suscita que, nuestro llamado primer poder del Estado congratule a foráneos que poco o nada han hecho por el Perú, en desmedro de los que reinvindicaron y engradecieron nuestro glorioso pasado, como es el caso de don Marino Gonzales Trejo.
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