martes, 16 de febrero de 2010

ALTURAS DE PURHUAY


Porque nacimos en las alturas
te sabemos amar,
con ese sentimiento mágico
como se ama la libertad y la eternidad,
y Jugamos con tus dóciles olas,
cortejamos tu aprendida silueta
que danza con nuestros ojos.
II
Destino codiciado
de nuestros sueños de mayo.
Estás arriba cerca al éxtasis,
y más arriba aún, cerca de Dios,
enfrente de nuestro destino,
agarrada de nuestras manos,
conectada a las montañas
y a nuestra historia de
Apus y waganqus
III
En tus aguas se refleja
la luz de nuestras emociones.
Y cuando asoma el ocaso
tejiendo ilusiones,
tus indomables riscos
arcanos como la noche,
se encienden seducidos
por el plenilunio
y se agigantan en tu faz
escarchada de estrellas.
IV
Espejo del celaje andino,
luciérnaga de las noches sin prisa,
donde todos soñamos despiertos
y fuimos felices,
sin que nadie nos moleste
V
Allí no existe dolor
ni hambre, ni miseria,
sólo la mirada del Hacedor,
la brisa de la paz,
el murmullo de la libertad,
¡El sonido de las alturas!
y mansos vaivenes de gráciles olas
en donde nuestros sueños navegan
VI
Estás acá nomás Purhuay
bajo nuestro mágico cielo
aupada de ancestrales montañas
escondida en las sístoles del tiempo
acariciando nuestros sueños de libertad,
nuestras ansias de paz, de justicia
y orgullo sin fin.

Abelardo Malqui Hidalgo



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