FELIZ DIA "VIRGEN DE FATIMA"

¡Salud, querida escuelita, en este tu enésimo aniversario!

No sé cuantos años cumplas, nunca hurgué cuándo naciste será porque asumí con convicción la frase del Maestro Glicerio Trujillo Agüero, un día como hoy, hace ya 15 años exactamente en un discurso preñado de orgullo gratitud y nostalgia dijo: “Esta escuela en la que laboré 30 años, es señoras y señores la Decana de las escuelas primarias de la zona de los Conchucos”. La vieja “Prevuchi” hoy Virgen de Fátima” tiene el más apreciado blasón de la historia educativa de Huari, blasón decorado de infinitas primaveras, con preciadas caravanas estudiantiles, y generaciones florecidas, con frutos proteicos que dieron mucho a Huari y sus contornos. En síntesis, es la lozana antesala de lo mejor que le sucedió a Huari desde hace más de un siglo .

Les dejo algunos poemas pergeñados en el fragor del más hermoso de los profesiones, como es la docencia, durante mi estadía en ese inolvidable recinto.

ESCUELITA DE MI PUEBLO

I

Escuelita de mi pueblo
Solar de luces
De cantos y trinos
Y eternas sonrisas.

II

Tu viejo patio
Esgrime orgulloso
Sus huellas vetustas
De rastros andados

III

Hoy en tu día
Te siento más cerca
Mi canto y un beso
Grafican mi ofrenda

IV

De tu vientre fecundo
Salieron al mundo
A rauda carrera
Tus hijos de siempre

V

Hoy son de la patria
Pilares de acero
Y de nuestro huari
Bastiones de fe.

VI

Escuela de pueblo
Regazo de amor
De sol y lluvia
Que exhalas saber.

ESCUELITA

I

Ayer papito me trajo
A tus aulas calurosas
Para con juegos y trabajo
Aprenda muchas cosas

II

Curso el primer grado
Aún soy un benjamín
Me preparo con agrado
¡Para ser tu paladín!

III

Tengo hermanos mayores
Ayer los conocí
Son como un jardín de flores
Y color de carmesí

IV

Hoy te conozco más
Sé de tus desvelos
A todos tus niños amas
¡Contentos quieres verlos!

V

Conocí a la patrona
Y su nombre indagué
Es la Virgen de Fátima
A quien veneraré

A LOS NIÑOS DEL MUNDO

I

A los que nacen a la vida
Cogollos de enésimos versos y amoríos
Caminen por senderos de frescos bríos
Criaturas de imaginables sueños y gozos

II

Sonrían como el jardín
De las eternas primaveras
Aneguen el inmenso horizonte
Con rutilantes estrellas
¡Así!
Entre risas de árboles y cóndores
Construyan su felicidad

III

Despeguen en los cielos límpidos del ande
Su inocente imaginación
Fúndenla con las estrellas
Del universo infinito
¡Y así!
Entre fanfarrias y arpegios
¡Vivan su felicidad!

IV

Ofrezcan su mano
Al viento, a la lluvia y al rocío
Exhalen alientos de cándida fe
Pídanle a la lluvia que corteje a los prados
Y al sol inmenso de cada amanecer,
Róbenle sus frescos resplandores de vida

V

¡Ofrezcan su mano a todas las sangres!
¡Entonen su himno con todas las voces!
Dirijan su mirada a todos los senderos
¡Y férreamente fundidos
Entonen cánticos de fraternidad!