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"Mama Alchi y Getu junto a sus nietos: Pasculy y Ginito" |
Mi hijo, el mayor de los nietos varones , cuya infancia discurrió al calor y abrigo en gran medida de sus abuelos paternos, guarda en sus abultadas maletas recuerdos indelebles con sello de longevidad que cada vez que se evocan se abren lozanos y sabrosos para escanciarlos con fruición y también con nostalgia. Su abuela fue, además de ser su más desconfiada celadora, la apoderada acusiosa y atenta , tanto en su educación inicial y cuanto en primaria, que acudía al llamado de su profesora a lidiar con sus travesuras, que no fueron pocas, y litigar con singular ternura y a veces "fiereza" frente a sus pueriles litigios en el aula.
Su Maestra de primaria, de grato recuerdo para nosotros sus padres y en especial para mi hijo, nos referíó muchas veces, a manera de anécdota, sus memorables performances de “apañadora” digo apoderada, como en aquella oportunidad en que rompió con un balonazo la luna de una de las ventanas de la Dirección, que ameritó, como es natural, la presencia de la apoderada. Fue ella a responder y a defender. Sus innegables condiciones abogadiles, como buena hija de escribano, liberaron a su querido nieto de toda responsabilidad, es decir, lo absolvieron. Recuerdo que aquel mediodía mientras almorzábamos en casa de mis padres discurseaba con orgullo los entretelones de aquel litigio. Nunca logró enterarse eso si, que a escondidas logramos “arreglar” con la dirección y con su profesora el costo de su travesura. Frente a su inmensa ternura para con su nieto, que en algún momento la cegó y le hizo perder objetividad, solíamos sutilmente asumir algunas de las tracesuras de mi aún pequeño hijo.. Fue siempre así mi Madre, querendona con sus nietos. El haber tenido tantos hijos e ir quedándose sola por la diáspora dolorosa de la mayoría de ellos, influyeron sobremanera, buscó volcar toda su ternura en su único nieto en aquel entonces, se desvivió por él y nos suplió, mucho tiempo, con generosidad y desinterés admirables.
Otra de las anécdotas donde se puso de manifiesto la "fiereza" maternal de mi madre fue cuando en los Juegos Florales de Primavera, estando mi hijo en el último grado de primaria, ganó el concurso provincial de declamación organizado por la UGEL-Huari, el Director de su colegio, un tristemente recordado ex"curita", se negó entregarle el premio, aludiendo que aquel le correspondía a la institución mas no a él Como colegirán ustedes, la reacción de la abuela fue severa e inmediata, sin medias tintas y frontal, la emprendió contra aquel mal director poniendo en duda sus cualidades sacerdotales. Usted no es justo y está malatratando a mi nieto, su actitud no es digna de un sacerdote, dijóle. Años más tarde este personaje se alejó de sus votos sacerdotales y hoy por hoy camina por otros senderos.
Todas las abuelas tienen el mismo sello: Son las que inventan cuentos de duendes, las que relatan nverosímiles historias y encumbren las travesurasa a espaldas del abuelo gruñón y que todavía se descubren luego de muchos años, como por ejemplo ¿Quién destrozó los maceteros o arruinó los "vigilados" huertos? ¿Quién maltrató a los indefensos polluelos de la granja y a no pocos los situó al borde de la muerte? ¿Quién hizo del patio de la casa su fortín deportivo en donde libérrimo, en ausencia del abuelo, empalmó sus más furibundos balonazos embadurnando las relucientes y blanqueadas paredes y convido a su pequeña tropa de amigos los todavía inmaduros manzanos, tomatillos e higos? ¿Quién fracturó de un golpe certeró de balón uno de los aromáticos cedrones, que para mi padre constituían sus mas preciados arbustos, por lo dificil que resultó hacerlos "tacllar" o prender? o lo más importante¿ Quién encubrio tamañas hazañas? ...
Hoy, segundo domingo de mayo, alejado de mi Huari, espacio vital, hermoso y entrañable, a cientos de kilómetros de ese íntimo proscenio familiar como fue nuestra casa solariega, mudo testigo de nuestra vivencias infantiles y juveniles, saludo con reverencia a mi MADRE a mi adorada "Mama Alchi" , madre virtuosa, abuela sin parangón, cuya existencia es la luz que alumbra nuestro camino y alienta nuestra existencia.
¡¡Feliz día a todas las Madres de Huari, el Perú y el Mundo!!